El Conquense se llevó un derbi con poco fútbol y demasiadas tarjetas

Fútbol: Tercera // (2-0). Victoria de la Balompédica ante un Quintanar que terminó con siete

Dos goles, uno al principio y otro al final, un partido poco atractivo para el espectador y la friolera de diecinueve tarjetas, cinco de ellas rojas, es el balance que deja el derbi provincial que han disputado el Conquense y el Quintanar del Rey en La Fuensanta. Se cumplieron los pronósticos y ganó la Balompédica por 2-0 con tantos de Rangel, en el minuto 2 y de Novillo, en el 92’, si bien el protagonismo se lo llevó el colegiado García Onrubia. Expulsó con roja directa al blanquinegro Rangel y al capitán verdiblanco Diego, además de enviar a los vestuarios antes de tiempo con dos cartulinas a los quintanareños Fatai, Bibi y Adrián. Los de Tolo Ocaña acabaron con siete hombres. En suma, derbi “tostón” en el que lo más positivo para los de Fabregat son los tres puntos que les permiten seguir segundos.

 Rangel pescó en río revuelto

Había pedido Jordi Fabregat a los suyos durante la semana concentración e intensidad para reencontrarse con su fútbol y lograr un triunfo que les devolviera la tranquilidad. Pues bien, los blanquinegros salieron aplicados y, antes de que se cumpliera el segundo minuto ya ganaban. Fue tras un saque de esquina en el que Rangel entró con todo al remate. Sabía el central de los nervios del portero Coe, que tomaba la alternativa con la sanción de Javi Martínez, y lo aprovechó. Tras un rechace, empujaba a placer el balón a las mallas, mientras el joven cancerbero se quedaba tendido en el césped protestando una posible falta.

    Los cuatro minutos que estuvo parado el choque no sentaron bien a los locales. Quizá todavía acusando las dudas del descalabro de Toledo, porque se vieran ganando tan pronto o por la buena presión en la salida del balón del Quintanar, el caso es que el Conquense se perdía en imprecisiones. Ni Borja y Folch se asociaban, ni eran capaces de combinar y ni los balones y diagonales en largo llegaban a buen puerto. Tolo Ocaña había ordenado bien a los suyos y, estos, replegados atrás y saliendo al contragolpe, acapararon las ocasiones en la primera parte. Sin ser peligrosas para Manolo, Pepelu, Diego y Bibi, probaron fortuna sin éxito. Por el Conquense, resaltar sólo un tiro de Aragón que desvió Pepelu en el área pequeña y una buena parada de Coe en el 45’ a un centrado disparo de Folch. En resumen, primer tiempo soso, con muchas faltas y algunas tarjetas. El festival llegaría en la segunda mitad.

 Carrusel de expulsiones

Tras el descanso, Ocaña trató de meter más velocidad en ataque con Cholilla y Fabregat se apresuró a leer la cartilla a los suyos tratando de enderezar el rumbo. Comenzaron bien los blanquinegros con una buena combinación entre Manzano y Cristian, quien dejó en la frontal el balón a Borja Hernández para que el canario intentara la vaselina. Se marchó por poco.

    Aún así, al Conquense le faltaba mordiente y el técnico catalán se la buscó con la entrada de Tajamata y Borja Lázaro. Ambos tendrían su protagonismo. El madrileño batalló y, en su primer balón, provocó la segunda amarilla de Fatai, el primer expulsado. Corría el minuto 55 y, con esta roja, justa, García Onrubia pareció abrir la caja de los truenos. Cinco minutos después, Rangel golpeaba con el codo en la cara de Bibi en un salto y veía la roja directa y, a renglón seguido, Lázaro controlaba ante Diego que le derribaba siendo el último defensor y también enfilaba los vestuarios. Dos acciones del madrileño y dos expulsados en el rival. Aún habría más.

 Tajamata perdona

Con diez contra nueve sobre el césped, Borja Lázaro era derribado en el área por un Adrián que se pasaba de frenada. Penalti claro que Tajamata fallaba. El exquintanareño se topaba contra el poste en el minuto 74 y posponía la sentencia. Aunque el partido era controlado por la Balompédica, el Quintanar seguía saliendo rápido con un Bibi peleón. Precisamente, por dos manos, voluntarias o no, el ‘7’ del Quintanar del Rey sería el cuarto expulsado del partido en el minuto 82.

    Con más espacios todavía, Borja Lázaro tuvo otras dos ocasiones para hacer el segundo, pero su ansiedad le pudo. En una remató desviado de cabeza y en otra estrelló el balón en el mano a mano contra Coe. Run-run en la grada. Ayer trabajó bien y sólo le faltó el gol. Quien lo marcaría para certificar la victoria sería Novillo. El tomellosero, relegado a la suplencia, aprovechó su oportunidad y, ya en el descuento, recogió un balón suelto a la salida de un saque de esquina y fusiló a placer. El partido estaba visto para sentencia, si bien en la última jugada, una entrada a destiempo lo costó a Adrián la segunda amarilla. El Quintanar terminaba con siete y el Conquense se llevaba los tres puntos para seguir en la segunda plaza. Puntos que dan tranquilidad, pero que no deben ocultar que el equipo no jugó bien y debe seguir mejorando.

 
Ficha técnica:

-2-U.B. Conquense: Manolo, Torlá, Aridani, Rangel, Alfonso, Folch (Tajamata, 54’), Borja Hernández, Manzano, Quique Aragón (Novillo, 63’), Cristian y Vega (Borja Lázaro, 64’).

-0- Quintanar del Rey: Coe, Juan, Sergio (Roque, 75’), Pepelu, Fatai, Adrián, Diego, Carlos City, Bibi, Santi (Cholilla, 46’) y Javi Bolo (Óscar, 88’).

Árbitro: García Onrubia, asistido por Perezagua Escobar y Rodríguez Ruiz, de la delegación de Toledo. Amonestó por parte local a Aridani, Cristian, Quique Aragón y Manzano. Además expulsó con roja directa a Rangel en el 60’. Por parte del Quintanar vieron la amarilla, Sergio, Pepelu, Carlos City y Santi. Además, fueron expulsados por doble cartulina Fatai, en el 55’, Bibi, en el 82’, y Adrián, en el 93’. Igualmente vio la roja directa Diego en el 62’, por lo que el Quintanar terminó con siete jugadores.

Goles: 1-0, Rangel (Minuto 2); 2-0, Novillo (Minuto 92).

Incidencias: Encuentro de la 33ª jornada de liga en Tercera División (Grupo XVIII) disputado este domingo por la mañana en La Fuensanta ante unos 700 espectadores. El partido fue declarado como Día del Club y eso restó afluencia en las gradas. Mañana soleada y primaveral. Césped en buenas condiciones.