Liga Asobal: El Ciudad Encantada lanza un SOS a la
sociedad conquense
Ver el vaso medio lleno o medio vacío… Para gustos…
colores y como no podía ser de otra forma, en el BM. Ciudad Encantada, también
los hay más optimistas y bastante menos con respecto al futuro del club. Eso
sí, el mensaje que sale de los despachos de El Sargal es único, claro y
contundente: El club necesita la ayuda de instituciones, empresas y de sus
aficionados para seguir caminando. Y cuidado, no valen buenas palabras e
intenciones, hacen falta hechos traducidos en dinero. El entrenador y directivo,
Zupo Equisoain, era tajante, “o aquí se implica la gente y apoya o yo el año
que viene no estaré aquí y no habrá balonmano de élite en Cuenca”.
El Globalcaja Ciudad Encantada necesita la ayuda de
la sociedad conquense. Así lo han puesto de manifiesto este jueves en El
Sargal, el presidente del club, Isidoro Gómez Cavero y el entrenador, Francisco
Javier Equisoain, también miembro de la directiva. Gómez Cavero optó en su
alocución por la vida conciliadora y conservadora, mientras Zupo Equisoain,
directo y sin pelos en la lengua, no se andaba con rodeos y con claridad
pintaba muy negro el futuro del balonmano de élite en Cuenca.
El
club puede desaparecer
El técnico navarro, viejo zorro en esto del
balonmano, no podía ocultar su preocupación y cabreo ante la situación que,
según aseguraba, le tiene cabreado. Para Zupo no valen medias tintas y lo que
hace falta es que la gente, los socios y toda la sociedad de Cuenca se
implique. “Si esta situación económica que hay no cambia veo difícil que el
equipo salga el próximo año. La realidad es que salvo Moyano, Mendoza y Sifre,
otros once jugadores acaban contrato en junio y no hemos podido planificar nada
de futuro, ni renovaciones, ni fichajes, porque no sabemos con cuánto dinero ni
con cuanto presupuesto vamos a contar. O se implica la gente o yo el año que
viene no estaré aquí. Hay que hacer un SOS para que la gente se dé cuenta de la
cruda realidad y que si no se ayuda, no habrá balonmano en Cuenca”.
Pero, ¿cuál
es la situación real del club? Según explicaba el presidente Isidoro Gómez, la
directiva en estos dos últimos años ha conseguido reducir la deuda de más de
700.000 a unos 300.000 euros y, con los compromisos de las instituciones, muy
inferiores a los de las otras temporadas, se espera cerrar la temporada. El
problema vendría en la próxima, la 2013/14, en la que, ahora mismo, el club
solamente tiene comprometido el patrocinio de Globalcaja y menos de 100.000
euros en cuotas de socios, que según el máximo mandatario conquense, incluso se
bajarán.
Realistas
Siendo conscientes de los ingresos con los que se
puede partir, Gómez avisó que la intención del club es negociar en las próximas
dos semanas con instituciones y empresas las aportaciones para la próxima
temporada y el calendario de pagos. Y es que, lo que tienen claro desde la
directiva es que no saldrán para llegar a diciembre con deudas y tener que
cerrar. ¿Puede desaparecer el club? Según el presidente, “si los compromisos
que se deben cumplir, no llegan y no se suman de cara al año que viene, sí. En
caso de que las instituciones paguen y tanto socios como empresas se impliquen,
la directiva seguirá trabajando duro para mantener el club con un equipo en
Liga Asobal y a los 300 niños que militan en sus categorías inferiores.
Todos ellos
estarán en la pista en la previa del derbi del sábado frente al Quabit Guadalajara
en El Sargal. Son la prueba de lo que este deporte significa para Cuenca y,
desde la directiva esperan que sirva para concienciar a la sociedad de la
ciudad y de la provincia. En ellos está el futuro de un club que, como
subrayaron Gómez y Equisoain, no puede ya ahorrar más. Con los gastos mínimos,
la única forma de reducir sería en la plantilla y, evidentemente, eso afectaría
a la competitividad del club.
Aclaración
de Zupo
Zupo reiteraba en este aspecto, la confección de la
plantilla del próximo año su inquietud. “Estamos en abril y no hemos movido un
dedo. Estamos en espera mientras otros equipos están haciendo ofertas y firmando
jugadores. Necesitamos que la gente se movilice, que ponga urnas, que si tiene
un piso vacío que no lo deje al club para que lo gestionemos y podamos alojar
allí a nuestros jugadores y reducir gastos”.
Igualmente,
al hilo de la reducción de gastos, el navarro no dejó pasar la oportunidad de
salir al paso de algunos comentarios que criticaban al club por dejar salir en
enero a Sorrentino y Cavor. “Los dos se fueron tras hacer una primera vuelta
histórica con 18 puntos y en la que El Sargal disfrutó como nunca. Llegaron dos
ofertas, querían marcharse y nosotros necesitábamos dinero para pagar las
nóminas de la plantilla y se fueron. Luego han venido Vidal y Jiménez y el
balance de esto son 15.000 euros para nuestra caja. Es cierto que lo hemos
pasado mal, pero en el último mes el equipo se ha recuperado y esperamos cerrar la
temporada bien en estos últimos cinco partidos”.
Por tanto,
con este aviso a navegantes, más suave por parte del presidente y muy dramático
desde boca del entrenador, el Ciudad Encantada se apresta a vivir el derbi
regional del sábado (17.30) en El Sargal frente al Quabit con la duda de Juanjo
Fernández. Es la tarde para que los aficionados respondan y llenen hasta la
bandera el pabellón. Debe ser una fiesta reivindicativa de que Cuenca quiere
seguir teniendo balonmano. Hechos y no palabras.
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